LOS 99 BELLISIMOS NOMBRES DE DIOS
REFLEJOS DE CONCIENCIA ESPIRITUAL
En el nombre de Dios. El Clemente. El Misericordioso
Para el ser humano, Dios es una realidad que está representada en universos conceptuales donde se establecen dualidades y categorías, pero la realidad de Dios, por mucho que queramos profundizar, es un Universo inabarcable.
Por lo tanto, no podemos llegar a Dios, porque primero, hemos de desentrañar el enigma que hay en cada uno de nosotros mismos, conocernos contemplando la inmensidad inabarcable que supone cada ser humano, por ello, el camino de la reflexión, la oración, la meditación, la recitación de Sus Bellísimos Nombres, y, observando como se abren espacios de conocimiento y libertad a través de Sus Reflejos, los Reflejos inabarcables de Dios, nos pueden hacer alcanzar una visión mucho más canalizadora, equilibrada y sanadora de nuestro Ser interior, y, por ello, deberíamos acceder al entendimiento de Dios como el Gran Equilibrador, y. nada más clarificador que los magníficos versos de Ibn-al-Arabi, maestro de maestros, para acceder mínimamente a una conciencia abarcadora de la magnificencia espiritual.
“Que asombroso es el prodigio de una gacela velada.
Que señala un azufaifo, y hace señas con sus ojos.
Y, que sus pastos se encuentran entre astillas y entrañas.
Que maravilloso jardín en medio de tanto fuego.
La paz de acoger cualquiera de las diversas formas.
Mi corazón se ha tornado, es pasto para gacelas y convento para el monje.
Para los ídolos templo.
Kaaba para el peregrino, es las tablas de la Torah, y, es el libro del Corán.
La religión del amor sigo, a donde se encamine su caravana.
Que amor es, mi doctrina y mi fe”.
En todo ello, está Dios. El Clemente. El Misericordioso.
Laarbi